Modernidad, cultura y Educación

MY Marcos Manuel Guzmán Alfaro*



Resúmen:

Es importante comprender conceptos y filosofías como la modernidad que moldean la cultura, con el propósito de realizar un continuo auto análisis de la educación que se está impartiendo, siempre buscando una formación integral que produzca progreso individual y colectivo.


Abstract:

Understanding the concepts and philosophies that mold our culture, such as modernism, is important to be able to constantly analyze the education that is being given in order to seek an integral formation that produces individual and collective progress.


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*Administrador Educativo Universidad San Bucnaventurd, Espedalisla en Docencia e Investigación Unlversttarla Universtdad Sergio Arboleda Magister en educación Pontificia Universidad Javerlana.

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El proyecto de la modernidad comenzó con los filósofos de la Ilustración, quienes buscaban desarrollar la ciencia objetiva, la moralidad, las leyes universales, y el arte autónomo, de acuerdo con su lógica interna. Pretendían además liberar los potenciales cognitivos de cada uno de estos dominios para emanciparlos de sus formas esotéricas, para la organización racional de la vida social de cada día. Tenían la esperanza de que las artes y las ciencias fomentaran la comprensión del mundo y del sujeto, promoviendo el progreso moral, la justicia de las instituciones e incluso la felicidad de los seres humanos. A través de los años, para muchos "la modernidad" se convertió en sinónimo del desarrollo del arte europeo, también llamado el "modernismo estético:' Habermas (1991) relaciona esto con el vanguardismo, que se rebela contra las funciones normalizadoras de la tradición y vive de la experiencias de rebelarse contra todo lo que es normativo. Sin embargo, en su concepción, el proyecto de la modernidad no es solamente el arte; sino siguiendo la idea de Max Weber, es la separación de la razón sustantiva expresada en la religión y la metafísica en tres esferas autónomas: la ciencia, la moralidad y el arte. Marshall Berman (1991 ), define la modernidad como "encontrarnos en un medio ambiente que promete aventura, poder, alegría, crecimiento, transformación de nosotros mismos y del mundo, y que al mismo tiempo amenaza con destruir todo lo que tenemos, lo que sabemos, lo que somos. ( ... ) La modernidad une a toda la humanidad [en una] unión paradójica, una unión de la desunión .. :' Para él la máxima expresión de la modernidad está en el modernismo del siglo XIX, descrito por Marx y Nietsche, resumido en la frase de Marx "todo lo que es sólido se evapora en el aire:' Brunner (1992), resume la modernidad como la concurrencia de cuatro aspectos que él llama "núcleos organizatlvos de la modernidad:' Estos son la escuela, la empresa, los mercados y las constelaciones de poder. A su vez, la interrelación de estos cuatro conduce a unos rasgos típicos de la modernidad, que son una sociedad capitalista, la cultura de masas, hegemonías mediadas por sistemas de consenso y predominio del interés corporativo empresarial. Si existe lo anterior en un determinado estado-nación, entonces se puede decir que es "moderna".

Para. Martín Barbero y Octavio Paz no se puede hablar de una sola modernidad, sino modernidades, en plural. La modernidad adquiere en cada contexto sociocultural una determinada configuración y expresión, acorde y dependiente de su herencias de tradiciones, de sus experiencias concretas vividas y de las redes institucionales particulares a su desarrollo histórico. Octavio Paz (1991), lo dice asl:"¿Qué es la modernidad? Ante todo es un término equívoco: hay tantas modernidades como sociedades. Cada una tiene la suya:' Refiriéndose al proceso de modernidad en México, dice: "La búsqueda de la modernidad nos llevó a descubrir nuestra antigüedad, el rostro oculto de la nación.lnesperada lección histórica que no sé si todos han aprendido: entre tradición y modernidad hay un puente. Aisladas, las tradiciones se petrifican y las modernidades se volatizan; en conjunción, una anima a la otra y la otra le responde dándole peso y gravedad~' En palabras de Martín Barbero, el modernismo en América Latina ha sido "Instauración de un proyecto cultural nuevo: el de insertar lo nacional en el desarrollo estético moderno a través de reelaboraciones que en muchos casos se hallaban vinculadas a la búsqueda de la transformación social".

El término "cultura," aunque difícil de definir como tal, es aquello que es compartido por un grupo determinado de sujetos, son los productos de la misma que conservamos, los significados que compartimos y que nos relacionan con unos más que con otros, es la visión del mundo, lo que construye el espíritu o la subjetividad. Pero sobre todo, las culturas son dinámicas, cambiantes y hasta contradictorias en sus modulaciones, están en un proceso de constante cambio por la interacción social de los sujetos, y hoy por hoy están pasando por un proceso de globalización, que hace referencia a la propagación de unos ciertos rasgos o de elementos aislados de una cultura a otras, gracias a las influencias entre los pueblos y por la comunicación a través de tecnologías diversas. Las culturas se relacionan entre sí y se "contaminan" unas de otras. Estos son cambios que ocurren imperceptiblemente de manera evolutiva, natural y por intercambio y contagio, a través del comercio de productos culturales y de las comunicaciones. Esto no es nuevo, ha sucedido desde sig los atrás. Europa adoptó el papel, muchos han aceptado la acupuntura china y en China han incorporado el teléfono y la Cocacola. Pero hoy por hoy las tecnologías de comunicación han hecho más fácil conocer y acoger otras culturas.

La educación es un mecahismo para implantar un tipo de cultura y para hacer realidad valores e ideales de cultura deseable. El sistema educativo sirvió a los colonizadores para imponer su cultura en los pueblos colonizados y actúa del mismo modo cuando un país asimila emigrantes o a sus descendientes a la cultura del país receptor. Los principios básicos modernos que animaron a los actuales sistemas de educación y a la orientación que adoptaron los curricula y las prácticas de enseñanza fueron la valorización de la cultura como contenido digno de reproducirse, la preparación del ciudadano para la vida democrática, la inserción en el mundo de la producción, el desarrollo de los individuos como sujetos. Uno de los pilares de la educación bajo la perspectiva moderna ha residido en la creencia de que la cultura tiene un sentido formativo que es posible extender a todos para el progreso, partiendo de la existencia de un núcleo de cultura valioso que, por su valor estético, moral o racional, merece ser conservado, reproducido y difundido. Sin embargo, no es un contenido fijado para siempre, sino que se considera un objeto revisable para su actualización constante.

La educación es un mecanismo para implantar un tipo de cultura y para hacer realidad valores e ideales de cultura deseable. El sistema educativo sirvió a los colonizadores para imponer su cultura en los pueblos colonizados y actúa del mismo modo cuando un país asimila emigrantes o a sus descendientes a la cultura del país receptor. Los principios básicos modernos que animaron a los actuales sistemas de educación y a la orientación que adoptaron los curricula y las prácticas de enseñanza fueron la valorización de la cultura como contenido digno de reproducirse, la preparación del ciudadano para la vida democrática, la inserción en el mundo de la producción, el desarrollo de los individuos como sujetos. Uno de los pilares de la educación bajo la perspectiva moderna ha residido en la creencia de que la cultura tiene un sentido formativo que es posible extender a todos para el progreso, partiendo de la existencia de un núcleo de cultura valioso que, por su valor estético, moral o racional, merece ser conservado, reproducido y difundido. Sin embargo, no es un contenido fijado para siempre, sino que se considera un objeto revisable para su actualización constante.

La educación es una forma de universalizar rasgos de la cultura y, a la vez, es afectada por la globalización en general. Lo que afecte a la cultura en general afecta a la educación, por la sencilla razón de que los fenómenos educativos son también de enculturación. La educación democrática enfrenta un nuevo reto para hacer posible la compatibilidad de instituciones sociales como espacios públicos en que sea posible el mantenimiento de las libertades individuales y la diversidad cultural. Por lo tanto se necesita definir un proyecto claro de educación para que ésta recupere la iniciativa, la importancia de ofrecer un modelo orientativo de ser humano que no se adopte como algo rígido, válido para fundamentar relaciones sociales y de vida con los demás. La situación de globalización cultural exige plantear una pedagogía crítica y desarrollar un currículo común no localista para buscar un equilibrio entre lo cercano a los sujetos y lo que es lejano pero les afecta. Para situarnos en este nuevo escenario tenemos necesidad de nuevos moldes de pensamiento, una referencia más cosmopolita para el ejercicio de la ciudadanía en una democracia también globaiizada. Son convenientes nuevos códigos éticos y el establecimiento de nuevas formas de control democrático de las realidades.

El proyecto educativo moderno ha sido un proceso importante en el cual se ha analizado aspectos fundamentales de la educación, principalmente la idea de que la educación es para todos, no solo para unos pocos privilegiados de la clase élite. Es evidente que la educación trae consigo progreso, y entre mayor capacidad de análisis y pensamiento crítico tenga un pueblo, sus ciudadanos se involucrarán de forma cada vez más activa y legítima en su propio desarrollo. Esto se hace evidente solo con la comparación de los campesinos colombianos con los "campesinos'' de los Estados Unidos, quienes utilizan antenas satelitales para pronosticar el tiempo y computadores para manejar todo el sistema de cultivos y animales. Por lo tanto, es muy real la necesidad de desarrollar currículos que incluyan tanto contenidos globalizados y conocimientos generales útiles para toda la raza humana, como también aspectos muy particulares para miembros de cada cultura y subcultura, especialmente en nuestra querida Colombia. Un ejemplo muy daro de la necesidad de esto se veía en las diferencias en los resultados del examen de estado ICFES de los estudiantes de la capital y los de la provincia, que no se debían solamente al hecho de que los estudiantes de la capital tenían mayor acceso a la educación, sino también al hecho de que el examen estaba sesgado hacia la vida en la ciudad, con preguntas que un muchacho del Chocó no podía comprender por la falta de vivencia. Con la Ley 115 de 1.994 y todos sus decretos reglamentarios, la descentralización de la educación, el cambio del examen del estado, la nueva forma de evaluación de los estudiantes, y todos los demás cambios que se han hecho en la educación en Colombia, la situación educativa ya se está empezando a mejorar. Queda mucho camino por andar, y por eso son fundamentales programas de estudio para poder, con conocimiento de la historia y la filosofía aplicada a la educación, continuar colaborando en esta muy significativa labor.

Muchas veces no se toma el tiempo de preguntarse el por qué de las situaciones de las vivencias diarias en aula de clase, y es necesario conocer el trasfondo y las filosofías que los estudiosos han elaborado para caminar hacia una solución real y efectiva. Desde este punto de vista es muy revelador ver la educación como la reproducción de una cultura, y nos conlleva a la pregunta ¿qué es la cultura que se está propagando actualmente en el quehacer diario?

En resumen, una vez más se resalta el hecho de que la educación transforma una sociedad, para bien o para mal. La labor de los educadores, gota a gota, llena el vaso de sabiduría o ignorancia en las personas que son y serán los portadores de las corrientes polfticas y sociales que le darán el rumbo a nuestra nación en el futuro no tan lejano. Es una responsabilidad muy grande y debe asumirse como tal, así la rutina diaria a veces oculte la magnitud del compromiso. Por lo tanto, es importante comprender conceptos y filosofías como la modernidad que moldean la cultura, con el propósito de realizar un continuo auto análisis de la educación que se está impartiendo, siempre buscando una formación integral que produzca progreso individual y colectivo.

 

Bibliografía

Berman, M. (1991). Brindis por la modernidad. En: Viviescas, F. Y Gira Ido F. (1991 ). Colombia: al despertar de la modernidad. Bogotá: Foro Nacional por Colombia.

Brunner, JJ. América Latina en la encrucijada de la modernidad, en Solis B. Y Núr1ez, L. et. al (1992). En torno a la identidad latinoamericana. VIl Encuentro latinoamericano de facultades de comunicación social; Comunidad. Identidad e integración latinoamericana. México, Opción, S.C.

Habermas, J. (1991 ). Modernidad versus postmodernidad. En: Viviescas, F. Y Gira Ido F. (1991 ). Colombia: al despertar de la modernidad. Bogotá: Foro Nacional por Colombia.

Lyotard, J.F. (1991). Respuesta a la pregunta: ¿qué es lo postmoderno? En: Vlviescas, F. Y Giralda F. .(1991 ). Colombia: al despertar de la modernidad. Bogotá: Foro Nacional por Colombia.

Martín Barbero, J. Modernidad, Posmodernidad, modernidades. Discursos sobre la crisis y la diferencia·. www.javeriana.edu.co/pensar/dissens 16/html.

Paz, Octavio. La búsqueda del presente. En: Viviescas, F. Y Giralda F. (1991 ). Colombia; al despertar de la modernidad. Bogotá: Foro Nacional por Colombia.